Esta masa es muy básica en cocina, tanto para dulce como para salado. Es muy fácil de preparar y si tenéis Thermomix más fácil todavía. Yo os lo voy a poner de las dos maneras. También os voy a decir como hornear esta masa y también la masa sablé.
Aunque en la receta de algunas quiches ya lo he explicado, me gusta también tener un apartado donde aparezcan todas las masas y así lo podéis buscar mejor.
La masa quebrada es menos delicada que la sablé ya que lleva menos cantidad de mantequilla por harina. La sablé siempre lleva doble peso de harina que de mantequilla y menos agua. Ver masa sablé
Ingredientes:
- 300 gr de harina normal
- 125 gr de mantequilla
- 1 pizca de sal
- 1 cucharada de azúcar ( o dos si se quiere para dulce)
- 100 ml de agua fría
Con estas cantidades os salen dos tartaletas de 24-25 cm de diámetro. Esta masa se puede congelar bien envuelta en film y mejor aplastada que en en forma de bola, de esta manera se descongela antes. En la nevera os dura una semana perfectamente, eso sí, bien envuelta. Yo cuando la hago siempre hago de más para tener siempre en el congelador y poderla utilizar en cualquier momento.
Preparar la masa poniendo la harina en forma de volcán en la encimera, y dentro del volcán la mantequilla en pomada en trocitos, el azúcar, la sal y el agua. Ir mezclando desde fuera hacia dentro hasta formar unas migas. Unir con la mano bien toda la masa para que quede todo bien integrado, pero sin amasar. Dejar en la nevera ½ hora más o menos en vuelta en papel film. En thermomix poner todos los ingredientes en el vaso y mezclar 15 segundos en velocidad 6. Sacarla del vaso y unirla bien con las manos.
Sacar la masa de la nevera y estirarla con el rodillo hasta dejarla más o menos de 2 ml. Cubrir con ella el molde redondo, sellar bien los bordes con agua para que se queden muy bien pegados y meterla en el congelador todo el tiempo que tarda en calentarse el horno a 180º. Pincharla con un tenedor por varios sitios (para que no se ahueque al cocer) y ponerla en el horno hasta que esté doradita. Esto se llama hornear en «blanco». Hay gente que la suele hacer forrandola con papel de aluminio y rellenándola de garbanzos hornearla un rato, luego los quitan y se vuelve a hornear otro rato ya sin el papel y sin los garbanzos, pero esto es una forma un poco antigua y engorrosa y la masa tiende a endurecerse. Haciéndolo como os he explicado queda perfecta y es mucho más fácil. Probarlo.